TREKKING por el PAIS DOGON en RUTAS

Data de publicació: Oct 11, 2014 6:35:29 AM

Este mes de octubre se ha publicado en la revista RUTAS DEL MUNDO mi artículo "Un trekking por el País Dogón", donde describo un itinerario a lo largo de la falla de Bandiagara (donde habita este pueblo de MALI).

Podéis leer algunos fragmentos en esta entrada. El texto completo lo encontraréis en la revista en papel, ya en los kioskos:

"Entre las fértiles aguas de la curva del río Níger y las llanuras semidesérticas de Burkina Fasso, en el sureste de Malí, se extiende la falla de Bandiagara, un acantilado de trescientos metros de altura y ciento cincuenta kilómetros de largo. Desde 1989 esta formación rocosa es Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO, no solo por lo espectacular del paisaje, sino sobre todo por ser el hábitat de una cultura que, viviendo cerca de la protección del escarpe, ha conseguido mantener ahí sus tradiciones ancestrales: el Pueblo Dogón."

"El primer pueblo propiamente Dogón que se suele visitar es Djiguibombo, en la parte superior del acantilado. Aquí se observa ya la arquitectura característica Dogón en laginna, la estancia familiar centrada alrededor de un patio. La casa principal es de adobe, con techos llanos. Al lado, las construcciones más sorprendentes son los graneros, elevados, de planta cuadrada y terminados en su parte superior con un tejado cónico de hierbas que recuerda vagamente el sombrero puntiagudo de un mago. Las pequeñas portezuelas que permiten acceder a su interior suelen estar muy ricamente esculpidas y están aseguradas por complejas cerraduras con llave. Hombres y mujeres poseen cada uno un granero distinto. El del hombre sirve solo para almacenar alimento (principalmente el grano de mijo, el más común de los cultivos en la zona), mientras que el granero de la mujer sirve para almacenar, sobre todo, cuencos con cerveza de mijo. Son las mujeres las que producen esta bebida fermentada que solo pueden beber los hombres, y con el dinero que ellas sacan de su venta en los mercados es con lo que compran sus ropas y joyas, que guardan también en el granero."

"A cuatro kilómetros de Kani Kombolé se encuentra Téli, donde hay el campamento para pasar la primera noche. Justo al pie del acantilado se ven las antiguas casas de los Telem: altas, estrechas y abandonadas. Desde que los leones y hienas o los agresores humanos ya no son un problema, los habitantes de Téli prefieren vivir en la llanura, a pocos centenares de metros del acantilado pero más cerca de sus cosechas. En Téli hay una mezquita, una iglesia y unas cuantas familias que todavía mantienen el animismo como religión. Por el campamento donde se pernocta a veces aparece uno de estos animistas con un puñado de conchas de caurí. Por una pequeña propina el viejo hechicero lee la fortuna del viajero a través de la posición de estas conchas lanzadas sobre la mesa. El pronóstico es tanto más favorable cuanto mayor sea la propina."